viernes, 2 de enero de 2009

Mundos

Algunas de las personas más interesantes que he conocido este año son personas que no he visto, ni he escuchado. Leer lo que escriben en sus blogs me ha ayudado, sin embargo, a recuperar y expandir intereses viejos, maneras distintas de ver y pensar las cosas que, por alguna razón, estaban ausentes de muchos de mis vínculos cotidianos.
Tan usuales se han vuelto esos cambios que ahora me detengo, casi sin darme cuenta, en medio de una conversación con amigas que sigue un curso y un ritmo más o menos usual y, cuando me preguntan en que estoy pensando, les hablo acerca de esos temas sobre los que leo y escribo. Les digo que pienso en cuáles son las consecuencias de ser una persona adulta, o en cómo impactan en la felicidad los estímulos diarios, o en lo importante que me parece ahora detenerme en los que estoy haciendo, atender y disfrutar: el sonido de la lluvia en el techo, el viento fresco que interrumpe el verano, el sabor del café. Y entonces ocurre algo extraño. Mis amigas se entusiasman, se enderezan en sus sillas y empiezan a contar como ellas han estado pensando también en cosas parecidas. Y la conversación se vuelve muchos más interesante.
Todo porque, sin saberlo, el mundo virtual y el mundo de la vida diaria, el de las personas próximas y el de las distantes, han entrado en contacto.

5 comentarios:

Eireann dijo...

:)

feliz año nuevo, uma!

uma dijo...

Gracias!!Y felíz año allá también (esta vez lo deseo en castellano)!

mar adentro dijo...

Viajé a la ciudad donde viven mis padres para verlos en Navidad, en el camino de regreso me bajé a caminar junto a un río que siempre me ha gustado. Mientras intentaba grabar el sonido del agua me acordé de ti y deseé que estuvieras bien. Mientras caminaba por la orilla del río de regreso a mi carro pensaba que aunque no tengo idea de cómo seas o apenas he leído algo de lo que escribes, y quizá es extraño, de verdad me da gusto haber encontrado tu blog y deseo que el año venga lleno de experiencias que te llenen de ti.

uma dijo...

L: Gracias! Tu comentario me conmueve! Y es cierto que es extraño, pero ocurre, esto de encontrar a otra gente relatando sus vidas y ver que su modo de pensar nos estimula, nos divierte, nos ayuda a pensar en nuestras propias vidas...Aún cuando conozcamos muy pocas de las cosas que uno tradicionalmente sabe sobre la gente.
En fin, a mi también me alegra haber encontrado tu blog, espero que tengas un buen año y que podamos continuar con nuestro diálogo virtual...

PD: Sospecho que mis múltiples posts sobre el deseo de agua este verano son la causa de que te acuerdes de mí al pasar por un río...Voy a tratar de ser menos monotemática!

mar adentro dijo...

No, lo que pasa es que cuando comentaste sobre eso me di cuenta que habemos muchos a quienes los ríos nos significan y tenemos ganas de ellos.